El fricando es un plato típico de la cocina catalana, originario de la región de Lleida. Se trata de un guiso de carne de ternera en salsa de tomate, cebolla y setas, que se suele servir acompañado de patatas o arroz. Sin embargo, a pesar de ser un plato delicioso y muy popular, a veces puede resultar difícil conseguir que la carne quede tierna y jugosa. Por eso, en este artículo te daremos un truco infalible para cocinar el fricando y lograr que la carne quede suave y sabrosa. ¡Sigue leyendo para descubrirlo!
La importancia de elegir una buena carne
El primer paso para conseguir un fricando tierno y jugoso es elegir una buena carne. Es importante que la carne sea de ternera, ya que es la más adecuada para este plato. Además, debes asegurarte de que sea una carne de buena calidad, fresca y tierna. Si la carne está dura o pasada, por mucho que apliques el truco que te daremos, no conseguirás que quede tierna.
Otro aspecto a tener en cuenta es el corte de la carne. Para el fricando, se recomienda utilizar cortes de carne con poca grasa y que sean tiernos, como la tapa de ternera o el lomo bajo. Estos cortes son ideales para guisos, ya que se deshacen fácilmente y aportan un sabor delicioso a la salsa.
El truco para cocinar el fricando
Una vez que tengas una buena carne, es hora de poner en práctica el truco infalible para cocinar el fricando y conseguir que quede tierno y jugoso. Este truco consiste en añadir una cucharada de azúcar moreno al guiso durante la cocción.
Puedes añadir el azúcar junto con los demás ingredientes, al principio de la cocción, o bien unos minutos antes de apagar el fuego, para que la salsa adquiera un sabor más dulce. El azúcar actuará como un ablandador natural de la carne, haciendo que quede más suave y jugosa.
Este truco es muy utilizado en la cocina catalana y en otras cocinas tradicionales, ya que el azúcar ayuda a equilibrar los sabores y a conseguir una textura más suave en las carnes. Además, no altera el sabor del plato, por lo que no tendrás que preocuparte por un resultado demasiado dulce.
Consejos para un fricando perfecto
Aparte de añadir el azúcar al guiso, hay otros consejos que puedes seguir para conseguir un fricando perfecto y que la carne quede tierna y jugosa. Aquí te dejamos algunos de ellos:
- Utiliza una olla de hierro fundido o una cazuela de barro para cocinar el fricando. Estos materiales retienen mejor el calor y distribuyen el calor de manera uniforme, lo que ayuda a que la carne se cocine de forma más suave.
- Sella la carne antes de cocinarla. Esto consiste en dorar la carne en una sartén con un poco de aceite antes de añadirla al guiso. De esta manera, se sellarán los jugos de la carne y no se perderán durante la cocción.
- Añade un poco de vino tinto al guiso. Además de aportar un sabor delicioso, el vino tinto ayuda a ablandar la carne y a conseguir una salsa más sabrosa.
- Cocina el fricando a fuego lento y con paciencia. La carne necesita tiempo para ablandarse, así que no tengas prisa y deja que se cocine a fuego suave durante al menos una hora.
- Deja reposar el fricando antes de servirlo. Al igual que ocurre con otros guisos, es recomendable dejar reposar el fricando unos minutos antes de servirlo. De esta manera, los sabores se asentarán y la carne quedará aún más tierna.
¿Qué acompañamientos elegir para el fricando?
Una vez que tengas tu fricando tierno y jugoso, es hora de pensar en los acompañamientos. Aunque tradicionalmente se sirve con patatas o arroz, también puedes optar por otros acompañamientos que combinen bien con este plato. Algunas ideas son:
- Puré de patatas o puré de boniato. Estos purés son una opción deliciosa para acompañar el fricando, ya que aportan una textura suave y cremosa que contrasta con la carne.
- Pasta fresca, como tagliatelle o espaguetis. La salsa del fricando queda perfecta con la pasta, y es una forma diferente y original de disfrutar de este plato.
- Cuscús o quinoa. Si prefieres una opción más saludable, puedes optar por acompañar el fricando con cuscús o quinoa, que aportarán una textura diferente y un sabor delicioso.
- Verduras al vapor. Si quieres una opción más ligera, puedes servir el fricando con una guarnición de verduras al vapor, como brócoli, zanahoria o calabacín.
El fricando es un plato delicioso y muy popular en la cocina catalana, pero conseguir que la carne quede tierna y jugosa puede ser un desafío. Sin embargo, con el truco que te hemos dado en este artículo y siguiendo algunos consejos básicos, podrás cocinar un fricando perfecto en casa y sorprender a tus familiares y amigos.
Recuerda que lo más importante es elegir una buena carne y cocinarla con paciencia y a fuego lento. Y si quieres darle un toque especial, no dudes en añadir una cucharada de azúcar moreno al guiso. ¡Verás qué diferencia!
Esperamos que este artículo te haya sido útil y que disfrutes de un delicioso fricando tierno y jugoso. ¡Buen provecho!